Después de casi ocho años de obras, el Museo de las Culturas del Vino de Cataluña (VINSEUM) estrenó el pasado sábado 9 de noviembre sus nuevas instalaciones al completo. A los espacios ya conocidos del Palacio Real de Vilafranca, se ha añadido un edificio de nueva planta con 3.500 metros cuadrados adicionales, tres exposiciones permanentes y nuevos espacios de servicios como el aula de cata, el aula educativa o el nuevo vestíbulo de acceso. La obra arquitectónica ha corrido a cargo del arquitecto Santiago Vives y la museografía ha sido diseñada por el despacho Varis Arquitectes, con Dani Freixes al frente.

“La nueva sede del VINSEUM”, explican fuentes de la institución, “es fruto de un ambicioso proyecto arquitectónico y museográfico que ha pretendido la modernización de las instalaciones y del discurso expositivo para adaptar el museo vilafranquino al espíritu de la sociedad del siglo XXI”. El nuevo VINSEUM se presenta como motor cultural de la ciudad y de su comarca, se convierte en referente clave del sector vitivinícola catalán, y su propuesta cultural y museística debe ser uno de los principales atractivos del destino turístico y promocional que trabaja bajo el amparo de los sellos de Penedès Turisme y del Servicio de Turismo del Ayuntamiento de Vilafranca del Penedès.

El nuevo edificio cuenta con un total de seis plantas -sótano, planta baja y cuatro plantas superiores-, abre conexiones a cada nivel que Io enlazan internamente con el Palacio Real, y facilita que el circuito expositivo pueda utilizar los espacios de ambas construcciones luciendo así el rico patrimonio arquitectónico que atesora el museo.

Tres nuevas exposiciones permanentes

Más de la mitad de los cerca de 5.000 metros cuadrados de superficie del museo renovado Io ocupan las tres nuevas exposiciones permanentes, todas ellas con las colecciones en el epicentro de un discurso que hace hincapié en las personas que han legado este patrimonio tan diverso y complejo, colecciones que son interpretadas en clave de presente y de retos de futuro.

Así pues, en la planta baja se puede disfrutar de La p/aza del vino, un espacio de acogida y acceso libre que pone en valor la vitalidad del vino catalán en pleno siglo XXI; en el sótano, Las raíces propone un viaje a los orígenes del museo y del Penedés; y en las plantas 1, 2 y 3 Las culturas del vino de Cata/oía despliega la gran exposición que narra la historia de la viña y del vino del país desde una mirada transversal y holística.

La inauguración del nuevo VINSEUM significa la culminación de la segunda fase del proyecto de reforma y transformación de las instalaciones del museo vilafranquino que empezó en el año 2018.

Un objetivo que ha sido posible gracias al apoyo de la Unión Europea (a través de los fondos Feder), de la Diputación de Barcelona y de la Generalitat de Catalunya. “Un hito”, sostienen las mismas fuentes, “que, por encima de todo, es fruto del apoyo económico, técnico y humano del Ayuntamiento de Vilafranca del Penedés”.

Cabe recordar que el proyecto arquitectónico comenzó con una primera fase que supuso la rehabilitación de los dos edificios históricos del museo, la Capilla de Sant Pelegrí, en el año 2007 y del Palacio Real, en el año 2012. En este caso, el museo contó con la financiación de los ministerios de Cultura y de Fomento, de la Generalitat de Catalunya y el incondicional apoyo del consistorio vilafranquino.

Acto de inauguración

Durante el acto de reapertura del Museo de las Culturas del Vino de Catalunya, su director Xavier Fornos recordó la trayectoria y el trabajo colectivo que han posibilitado esta nueva etapa, y expresó el deseo de convertir el museo en un referente de interés nacional.

Entre los discursos de inauguración, el sumiller Josep Roca resaltó la oportunidad del VINSEUM para «hacer entender que la cultura del vino tiene que ver con la más antigua de las culturas, que es la agricultura» y elogió el compromiso del museo de reivindicar el paisaje, el territorio y la cultura. Joan Tarrada , presidente de la Junta del VINSEUM, destacó la distinción que recientemente ha obtenido el VINSEUM como mejor museo del vino de Europa por parte de Iter Vitis .

Por su parte, Lluís Valls, delegado de Gobierno de la Generalitat en el Penedès, celebró este nuevo inicio como «la culminación de un proyecto de reforma que reafirma el VINSEUM como un referente para el país». Pau González, diputado de Acción Cultural de la Diputación de Barcelona, subrayó la labor del museo como centro neurálgico de la cultura del vino en Cataluña.

Por último, Francisco Romero, alcalde de Vilafranca, finalizó el acto con palabras de agradecimiento hacia todas las personas que han hecho realidad esta nueva etapa, afirmando que el “VINSEUM es ahora la casa de las culturas del vino de Cataluña y un símbolo de perseverancia, trabajo en equipo y resistencia”.

El pasado fin de semana, VINSEUM abrió sus renovadas instalaciones al público general con dos días de puertas abiertas para todos los interesados. Las entradas para visitar el nuevo museo están disponibles en entradas.vinseum.cat