La ‘hoja de ruta’ adoptada, recientemente, en Nueva York por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) es clara: intentar reducir el consumo nocivo de alcohol y las enfermedades asociadas, pero sin penalizar el consumo moderado y responsable que, como ocurre en el caso del vino, ha demostrado tener efectos saludables.
A este respecto, e Comité Europeo de Empresas Vitivinícolas (CEEV) ha acogido con satisfacción la Declaración Política negociada en la Cuarta Reunión de Alto Nivel de las Naciones Unidas sobre la prevención y el control de las enfermedades no transmisibles y la promoción de la salud mental y el bienestar, cuya adopción formal está prevista para la próxima Asamblea General de la institución que se celebrará en el mes de octubre.
La patronal europea del sector vitivinícola, sostienen fuentes internas, “cree en la importancia de abordar el desafío global de las enfermedades no transmisibles mediante estrategias integrales, basadas en la evidencia y equilibradas que promuevan estilos de vida más saludables, el bienestar social y el desarrollo sostenible”. En este sentido, la declaración política refleja, en su opinión, este enfoque “al reconocer que la vía más eficaz para avanzar es centrarse en la reducción del consumo nocivo de alcohol, en lugar de penalizar el consumo moderado y responsable”.
El CEEV, cuya delegación compartió la perspectiva del sector vitivinícola en el Foro Multisectorial de las Naciones Unidas celebrado en Nueva York el pasado mes de mayo, celebra la confirmación por parte de las Naciones Unidas de “un enfoque que abarque a toda la sociedad”. “Este marco”, sostiene, “reconoce acertadamente la importancia de involucrar al sector privado para abordar los desafíos de la salud mundial”.
La Declaración Política se basa en compromisos globales previos, como la Estrategia Mundial para Reducir el Consumo Nocivo de Alcohol de 2010 y el Plan de Acción Mundial sobre el Alcohol de 2022, que ya han arrojado resultados tangibles. Entre 2010 y 2019, recuerdan las mismas fuentes, las muertes relacionadas con el alcohol disminuyeron más de un 20 % a nivel mundial mientras que la discapacidad relacionada con el alcohol disminuyó alrededor de un 17 %. “Estos resultados”, añaden, “demuestran que cuando la ciencia, la evidencia y la cooperación guían las soluciones, es posible lograr avances significativos”.

Wine in Moderation
El sector vitivinícola europeo, concluyen, “ha contribuido a estos esfuerzos y a desempeña un papel activo en la reducción del consumo nocivo de alcohol mediante su compromiso a largo plazo con el fomento de una cultura vinícola sostenible. Un elemento central de esta participación es la iniciativa Wine in Moderation, lanzada en 2008, que promueve hábitos de consumo responsables y ayuda a los consumidores a tomar decisiones informadas”.
De cara al futuro, la CEEV seguirá comprometida, en el contexto de un enfoque abierto a toda la sociedad, “a apoyar activamente los esfuerzos para reducir el uso nocivo del alcohol y promover la moderación en el consumo de vino, salvaguardando al mismo tiempo el patrimonio vinícola de Europa y garantizando la sostenibilidad a largo plazo del sector vitivinícola”.
Comité Europeo de Empresas Vitivinícolas
El Comité Europeo de Empresas Vitivinícolas (CEEV – www.ceev.eu ) representa a las empresas de vino, vino aromatizado y vinagre de la Unión Europea. Reúne a 25 organizaciones nacionales de 13 Estados miembros de la Unión Europea, además de Suiza, el Reino Unido y Ucrania, así como a un consorcio de cuatro empresas vinícolas europeas líderes. Las empresas representadas por el CEEV, principalmente pymes, producen y comercializan la mayoría de los vinos europeos de calidad, con y sin indicación geográfica, y representan más del 90 % de las exportaciones de vino de la UE.