La Asamblea General de la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV) celebrada en Bento Gonçalves (Brasil) del 23 al 28 de octubre durante el 39 Congreso Mundial de la Viña y el Vino ha aprobado el nuevo programa de formación de los enólogos que sustituye al vigente desde hace 25 años. El acuerdo adoptado en la última asamblea de la OIV en Brasil desarrolla, de este modo, la nueva definición de la profesión de enólogo aprobada el 7 de junio de 2013 en Bucarest (Rumania), que supuso un acuerdo histórico al reconocer y ampliar sus competencias y atribuciones. La anterior definición, establecida en Liubliana (Eslovenia) en 1976, y el consiguiente programa de estudios aprobado con posterioridad, habían quedado desfasados hacía muchos años debido a la creciente complejidad adquirida por la profesión enológica en las últimas décadas.
La nueva resolución OIV ECO 563-2016 sustituye así a la denominada OENO 2/91. No obstante, más allá de la frialdad de los términos alfanuméricos se esconde un difícil trabajo de equilibrios entre los representantes de decenas de países que se ha dilatado durante años. Ha sido necesario encontrar un denominador común que satisficiera tanto las necesidades de los enólogos como las preocupaciones de los productores, los consumidores y del resto de actores del sector vitivinícola y educativo.
Requisitos del nuevo programa formativo
El nuevo programa de formación detalla los requisitos necesarios para cumplir las competencias del nuevo perfil profesional del enólogo definidas en la resolución OIV ECO 492-2013 aprobada en Bucarest hace poco más de tres años. El nuevo currículo académico utiliza los estándares de la Clasificación Internacional Normalizada de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) (CINE 2011), y establece varios niveles de acceso: programas de grado de 3-4 años de duración (niveles 665 y 666) y programas de máster de cinco años (niveles 766, 767 y 768).
Según fuentes de la delegación española presentes en la asamblea celebrada en Brasil, “el programa aprobado actualiza los contenidos específicos de viticultura y enología de la antigua resolución e incluye nuevos contenidos formativos en gestión de la calidad y medio ambiente y en comercialización y comunicación vitivinícolas”.
Consulta previa a las universidades
Las universidades españolas que imparten enología fueron consultadas en su momento y pudieron hacer las alegaciones que consideraron oportunas para completar y perfeccionar el contenido del nuevo programa de formación de los enólogos.
Con esta resolución se ha completado en poco tiempo la actualización profesional del enólogo, lo que supone un logro importante para esta profesión en particular y para el sector enológico en general.